Por tratar de comunicarse con sus seres queridos, por curiosidad o para pasar el rato muchas personas han tenido contacto con la ouija pero una vez que la han probado quieren deshacerse de ella por la terrible experiencia. Lo que importa realmente al jugar con la ouija NO es el material con el que está hecho la tabla sino la intención y la fuerza del operador, es decir la sensibilidad que tenga para canalizar la persona operando la ouija y las personas que lo acompañan. La tabla sirve para que esta sensibilidad sea proyectada y haya un medio de comunicación. El operador de la tabla ouija le otorga las características sobrenaturales que él concibe. Cuando se tira una ouija y regresa al lugar en que se jugaba se debe al vínculo que se establece con los seres que se establece comunicación.