David Robert Jones, mejor conocido como David Bowie nació en Inglaterra el 8 de enero de 1947, desde su niñez mostró gran interés por la música y a lo largo de su vida estudió arte, música, diseño, trazado y composición tipográfica. Su legado musical es muy conocido y su fama y popularidad han traspasado fronteras, sin embargo, hay aspectos de Bowie que pocos conocen como que apareció en un comercial de los helados Lyons Maid y que fue rechazado en un casting de chocolates Kit Kat, también que hizo una película de treinta minutos de duración con su repertorio, lo que seguramente recordarán sus seguidores será como lucían sus ojos, sus iris eran del mismo color, pero una de sus pupilas estaba permanentemente dilatada por un puñetazo que recibió cuando tenía 15 años, también es muy conocido su gran éxito al asociarse con Queen en 1981 para colaborar en el sencillo Under Pressure, pero ¿Qué hay del pasado sombrío de Bowie? quizá este comienza con Defries, uno de sus mejores amigos y su manager por muchos años, el fin de la relación con su manager lo dejó un tanto desamparado, por lo que decidió continuar con la conquista del mercado estadounidense él solo, para esta aventura se mudó un tiempo a Los Ángeles, y es ahí donde vivió uno de los períodos más turbulentos de su vida, “una larga y oscura noche de insomnio del alma”, así lo describiría, y donde inicia su época obscura, su dieta se basaba casi exclusivamente en cocaína, leche y pimientos, estaba muy flaco y lucía frágil y pálido, casi fantasmal, estaba aislado del mundo, paranoico y al borde del colapso mental, dormía muy poco y pasaba noches enteras viendo películas de la época de la Alemania del nazismo, leía libros sobre esoterismo, magia negra y fenómenos paranormales y estaba interesado en cualquier disciplina que pudiera darle un conocimiento más allá de la ciencia y la razón, desde la Kábala hasta el ocultismo, la mitología y las leyendas, era común que quienes lo visitaban, vieran las paredes de su casa escritas con símbolos místicos y portales hacia otra dimensión y siempre había velas negras encendidas, Bowie se aseguraba que nadie tuviera acceso a los desechos de su cuerpo, como cabellos, uñas y fluidos por miedo a ser víctima de brujerías. “Sentía que estaba metido en un viaje personal demencial que simplemente me arrastraba”, explicaría en alguna ocasión, el talento musical de Bowie es innegable, sus aportaciones a la industria de la música y del cine fueron muy importantes, pero su vida personal fue muy dura, y estuvo llena de abandono, soledad, vicios y enfermedades mentales, Bowie falleció en Nueva York dos días después de su cumpleaños número 69 en el año 2016 a causa de un cáncer de hígado que le fue diagnosticado dieciocho meses antes, sin que nadie lo supiera.